
‘Cebolla’ Rodríguez se retiró del fútbol profesional: “no me guardé nada”
20/01/2023El futbolista lacazino Cristian ‘Cebolla’ Rodríguez tomó esta semana la decisión de finalizar su actividad como futbolista profesional tras 21 años de carrera. Es el jugador uruguayo que ha conseguido el mayor número de títulos en la historia: 27. El exfutbolista de Peñarol y la Selección Uruguaya habló con LVA sobre su decisión y lo que ha sido su carrera.
Mathias Medero
Este lunes 16 de enero Cristian ‘Cebolla’ Rodríguez anunció su retiro como futbolista profesional después de 21 años de carrera. Debutó en Peñarol en 2002, y en 2005 se fue a Europa, luego de declararse ‘en rebeldía’ (Peñarol entendía que aún tenía contrato vigente), para recalar en el París Saint-Germain (2005-2007).
Luego pasó al fútbol portugués donde estuvo cinco años: S. L. Benfica (2007-2008) y F. C. Oporto (2008-2012). Jugó en La Liga Española para defender al Atlético de Madrid de Diego ‘El Cholo’ Simeone (2012-2015). Luego tuvo pasos fugaces por el Parma F. C. y Grêmio F. P. A. (2015) y más tarde se fue al fútbol argentino: C. A. Independiente (2015-2017). Luego volvió a su casa, Peñarol (2017-2021) donde fue bicampeón (2017-18) y finalizó su carrera en Plaza Colonia (2021-2022), redondeando un total de 553 partidos y convirtiendo 104 goles a nivel de clubes.
Con la Selección Uruguaya jugó 103 partidos y convirtió 16 goles. Jugó cuatro Copas América (campeón en 2011), dos mundiales (2014 y 2018) y una Copa Confederaciones (2013). A nivel de clubes con PSG ganó una Copa de Francia, con Porto ganó ocho títulos nacionales y una UEFA Europa League. Con el Atlético de Madrid consiguió una Copa del Rey, un título de La Liga y la Supercopa de Europa. Con Peñarol fue campeón uruguayo en tres ocasiones y consiguió la primera Supercopa Uruguaya de la historia.
¿Por qué has tomado la decisión de dejar el fútbol profesional?
Fue una decisión difícil, pero ya lo venía preparando desde hace dos años cuando llegué a Plaza, porque el mundo Peñarol es muy complicado. Me ayudó mucho bajar la pelotita al piso, venir a Plaza me ayudó mucho a tomar esta decisión. Puse todo en la balanza para ver si era bueno seguir jugando o si ya me iba a dedicar 100% a la familia, al campo y esa fue la decisión que tomé.
¿Y ahora a qué te vas a dedicar? ¿Cuál va a ser tu medio de ingresos?
Siempre fue mi sueño jugar en Europa, hacer la diferencia y comprar campos y es a lo que me voy a dedicar. Obviamente no voy a estar inactivo, estaré jugando con amigos, acá en la vuelta, trabajando en el campo, esa fue mi decisión. Mi vida como futbolista termina, inicia una nueva, porque la carrera como futbolista es muy corta. La vida sigue y hay que hacer el futuro.

Más allá de lo económico ¿Qué es lo más importante que te deja tu carrera?
Muchísimos momentos, tanto con Peñarol como con la selección y con los equipos que jugué en Europa. La verdad que fue muy lindo jugar en la mejor competición del mundo, si se puede decir, como lo es la Champions League. Son lindos recuerdos. Poder salir campeón de la UEFA Europa League, fui campeón en la mayoría de los equipos que jugué. La verdad que eso es una felicidad enorme.
Siempre tuve ese sueño y admiré a muchos jugadores, por más que antiguamente había menos información, menos redes sociales, siempre quise ir a Europa, jugar en la selección, siempre quise jugar en Peñarol. Lo pude concretar y el plus siempre es estar en un equipo y poder ganar algo, porque no es lo mismo estar en un equipo y no ser protagonista, no ganar cosas. Tuve la suerte de que en la mayoría de los equipos que jugué, pude ganar cosas importantes.
¿Tenés en mente volver al fútbol como dirigente o técnico?
No, hoy en día lo tengo 100% descartado. Es lo que pienso hoy, esto es muy reciente, me retiré hace unos días. La idea es enfocarme y actualizarme en todo lo que es el campo, aprender cosas. Si bien para mí no es todo nuevo, son cosas que voy aprendiendo a futuro y esa es mi idea, trabajar en el campo, dedicarle tiempo a eso y a mi familia.
¿Cómo te sentís con el mote que te ha puesto Peñarol y la gente de ‘jugador hincha’? ¿Crees que al Peñarol del último tiempo le han faltado este tipo de jugadores?
Lo que pasa es que el mundo del fútbol cambió, las redes sociales cambiaron al jugador. Hoy en día se está más con el teléfono que en una charla. Yo soy de la vieja escuela: nos juntábamos a tomar mate y hablábamos de fútbol y de cosas, sin el celular en la mano. Hoy en día se perdieron muchas de esas cosas.
Sé lo que es el club, me crié ahí e hice desde la octava división a primera. Me salté algunas generaciones porque tuve la suerte de jugar desde muy joven en la primera división. Yo le agradezco al hincha que me tilde así, porque uno siempre trató de dejar bien parado al club, no solamente con un partido de fútbol sino en la calle, en el día a día, ser amable con las personas, ser educado, respetar la camiseta.
Obviamente que no se pueden ganar todos los partidos, pero hay formas y formas de perder un partido. Las ganas y la rebeldía no se negocian en el club, siempre tenés que dejar el máximo, por más que a veces no se dan los resultados, la gente siempre me lo hizo sentir, siempre traté de dar lo mejor para el club y soy un agradecido.

¿Aplica también para la selección uruguaya?
Capaz que sí. Gente del tradicional rival siempre me saluda en la calle, con mucho respeto, que admira las ganas que uno le ponía cuando jugaba en la selección y tengo muchos hinchas fanáticos de Nacional que siempre me lo reconocen, me lo dicen siempre en la calle y eso es bueno.
¿Tuviste el cierre que esperabas tanto en Peñarol como con la Selección Uruguaya?
No, no tuve el cierre que uno sueña, salir campeón de algo y retirarse, pero bueno, por algo pasan las cosas. Uno tiene objetivos y sueños pero no siempre se pueden cumplir. Yo siempre me voy con la cabeza en alto porque todo lo que pude dar, lo dí. No me guardé nada. Es así, a veces ganás y a veces perdés. Uno se tiene que quedar con las cosas lindas del fútbol, que la mayoría fueron lindos recuerdos.
¿La Copa Libertadores por ejemplo?
Sí, la Libertadores, que hoy es muy difícil ganarla. Más para el fútbol uruguayo, estamos muy lejos de eso y es difícil. Siempre teníamos la obligación de ganarla porque Peñarol es un cuadro grande, con mucha historia, pero la realidad es que hoy es muy difícil clasificar a una Libertadores y más difícil ganarla.
¿Cuáles son los mejores y peores momentos de tu carrera?
Yo creo que los momentos más feos fueron las lesiones. El fútbol es así. Te va bien, sos campeón y sos un ídolo. Te va mal, no salís campeón y pasas a ser la peor lacra. Yo duermo tranquilo, sé que dí el máximo de mí y pude ver a Peñarol campeón, lo pude disfrutar desde adentro y eso es lo lindo.
¿Te sentiste así en Peñarol? ¿Pasaste de ser el héroe al villano?
Sí, es algo que tiene que pagar todo referente, que a veces es duro porque no se cuida al realmente hincha del club que se inició en las inferiores. Pero bueno, es algo que aprendí de chico, con los referentes que tuve y siempre me quedó eso de los grandes amigos que tuve en Peñarol de la vieja escuela. Después era yo el protagonista, ya no era un niño y tenía que poner el pecho.
Después los momentos lindos es cuando salís campeón. Cuando haces un gol en una final, cuando juegas un partido importante. Esos son los momentos lindos, la gente al otro día te lo demuestra. Van a tatuarse tu cara, algo que no esperaba, y me pasó mucho en 2018 y 2019, que muchos hinchas de Peñarol se sentían identificados y se iban a tatuar mi autógrafo o mi cara.

¿Cuál fue el gol que más disfrutaste hacer?
Creo que fue la final con Defensor Sporting por la anual, que hice el gol en la hora. Estábamos muy cansados, ya sentíamos las piernas, sabíamos que si ese partido no lo ganábamos, el otro iba a ser muy difícil porque Defensor en ese momento andaba muy bien y me tocó hacer el gol en la hora.
¿Te sentís un representante de Juan Lacaze?
No sé si me siento un representante de Juan Lacaze, pero siempre lo quise ser. Diciendo Juan Lacaze en voz alta. Defendiendo al pueblo, nombrándolo siempre y fue mi sueño. Veía a Obdulio Trasante jugando en Peñarol que decía que era de Juan Lacaze, siempre lo admiré y le quise seguir los pasos.
¿Va a haber partido de despedida?
Yo no quiero. No es algo que me llame la atención. Lo que arranca se termina y lo mío se terminó y lo voy a seguir disfrutando desde afuera con mis hijas, con mi familia, con mi pareja, y siguiéndolo desde un costado.
¿Cuál crees que es la explicación de la carrera que pudiste hacer y qué agradecimiento especial quisieras dar?
Yo creo que fueron las ganas de triunfar, las ganas de llegar lejos. No solo llega el jugador de fútbol que tiene técnica. También hay que ponerle empeño y ganas. Creo que fui uno de esos jugadores, que no me sobraba nada pero las ganas siempre estaban.
El saludo especial a toda la gente por el respeto, por el cariño que me brindó en las buenas y en las malas, a mis amigos de infancia, mi familia, mis hijas, a mi pareja y a todos los allegados que en los momentos difíciles siempre estuvieron, nunca me dieron la espalda. Y a ese seguidor que por ahí no tiene la chance de verme, porque vive lejos o por diferentes motivos no nos hemos cruzado, agradecidos a ellos porque siempre estuvieron bancándome. Y para el mundo del fútbol, que por más que tiene muchos problemas es lindo, y es lindo lo que viví, no tengo más que agradecimiento.