
Murales de Rosario: una opción para los días del Patrimonio
26/09/2022Los primeros murales de la ciudad de Rosario, en Colonia, fueron pintados a fines de 1994, al año siguiente que se inauguraron los de San Gregorio de Polanco en Tacuarembó. En 28 años suman más de 50 pinturas en las que participaron casi 90 artistas locales. “Se considera una obra de todos, y representa un gran capital para desarrollar el turismo cultural”, dijo Yens Schou, impulsor de la iniciativa homenajeado en agosto con su propio mural (FOTO).
Leandro Costabel
La pintura mural es una antigua técnica artística que se aplica sobre un muro o pared, en base de piedra o algún tipo de construcción. Con lenguaje decorativo o didáctico, se desarrolló en caracteres religioso, simbólico o mágico. Hoy en día es una expresión urbana para contar historias e ideas.
En el sur del departamento de Colonia en la localidad de Rosario, existe una inmensa cantidad de murales dispersos por sus paredes, que la convierten en un museo al aire libre imposible de pasar inadvertido. A través de ellos el visitante ve reflejados algunos aspectos de la historia de la ciudad y del país.
El Museo de Arte Mural de Rosario, el primero de carácter histórico del país, surgió en la década de 1990 por iniciativa de un grupo de vecinos impulsado por Yens Schou, para dotar a la ciudad de un circuito turístico que empezó a concretarse por 1994.
Utilizando el ingenio colectivo las personas han ido retratando en estos murales la historia con personajes de la ciudad y del país: los canasteros, los inmigrantes, los vascos, los músicos, un homenaje a Gardel cuando cantó en Rosario, y también a otras personalidades como John Lennon.
Son en total 57 murales distribuidos por toda la ciudad en muros cedidos por los vecinos, que pueden apreciarse en cualquier momento con el único requerimiento de luz solar. Para componer las obras, algunos utilizan las puertas y ventanas del propio muro soporte.

Tomando como centro la Plaza Benito Herosa, se ubican en un radio de siete u ocho cuadras, pudiéndose encontrar algunos en una misma cuadra. Páginas de paseos recomiendan su visita.
Yens Schou, conocido popularmente como Tagito, es un ciudadano referente de Rosario. Contó que el arte mural surgió un 22 de diciembre de 1994, cuando la situación económica de la ciudad era complicada, y un grupo de vecinos y artistas tuvo la iniciativa de buscar en el arte una forma de expresar lo que les pasaba.
La biblioteca Varela, la Casa de la Cultura, y la ONG Mirando al Colla han ayudado a mantener los murales, y a desarrollar el recorrido. A su vez, recibir el premio Morosoli en 2001 sirvió de estímulo para continuar la actividad.
Se busca que el arte mural sea la tarjeta de presentación de Rosario. Si bien la localidad aspira a atraer más visitantes, debe recibirlos en forma gradual porque no cuenta con infraestructura necesaria para un turismo masivo. Con gran esmero se está desarrollando un libro para promocionar la actividad.
Schou señaló que los murales son respetados por la comunidad, no hay quejas de vandalismo, lo cual se ha logrado por el sentido de pertenencia que tiene la población. El retrato mural que reconoce el emprendedurismo de Schou, fue impulsado por la Ong Mirando al Colla, pintado por Álvaro Olivera, y enmarcado por Pepe Bidart. Está instalado en la calle Cerrito entre Sarandí e Ituzaingó.
Excelente reseña de la historia del arte mural en Rosario, gracias Luis, cómo siempre, tu aporte y mucho!!